Procastinación por
autodudas
El psicólogo William Knaus nos dice que las autodudas, junto con la baja
tolerancia a la tensión, son las raíces de las conductas de postergación y
evitación.
La autoduda es el reflejo de un proceso autodestructivo. Ocurre cuando
juzgamos nuestras habilidades como deficientes o inadecuadas. La autoduda se va
desarrollando en el contexto de la vida cotidiana y nos conduce a una
conclusión irracional. Por ejemplo, una de las más comunes ideas erróneas y
autodestructivas que está en la base de
la autoduda y conduce a la postergación, es la creencia de que: “Todo lo que yo
haga, tiene que ser hecho en forma fácil y de excelente calidad”.
Procastinación por
baja tolerancia a la tensión
Tiene lugar cuando tendemos a sobre activarnos en términos emocionales,
conductuales y cognitivos. También en aquellas ocasiones en que nuestras metas
se hacen difíciles de lograr o cuando existe algún tipo de obstáculo o bloqueo
en nuestros logros. Si algo nos produce tensión o irritación como por ejemplo,
conducir con mucho tráfico, prepararnos un examen, las discusiones de pareja,
etc. focalizaremos toda nuestra tensión en ese acto, por el que vamos a
sentirnos muy estresados, ya que magnificamos la importancia negativa de dichos
sentimientos. Por ese motivo, simultáneamente intentaremos neutralizarlos.
¿Cómo? Procurando poner fin a la tensión que estábamos experimentando en ese
momento, evitando o procrastinando.
Todo esto provoca en el procastinador una sensación de
caos, de no poder llegar a todo y de frustración, debido a la acumulación de
tareas pendientes. También produce sentimientos de insatisfacción, inseguridad,
inferioridad y estancamiento. Como consecuencia, además, se termina perdiendo
la confianza y el respeto de los demás.
Esto sugiere
que el lector identifique y recupere información presente en uno o varios
textos, construya su sentido global, establezca relaciones entre enunciados y
evalúe su intencionalidad. Para esto se abordan tres niveles de lectura:
Lectura literal, Lectura inferencial y la Lectura Crítica.
La Lectura literal es el nivel básico
de lectura centrado en las ideas y la información que está explícitamente
expuesta en el texto. La Lectura literal es reconocimiento de detalles (nombres,
personajes, tiempos y lugar del relato), reconocimiento de la idea principal de
un párrafo o del texto, identificación de secuencias de los hechos o acciones,
y la identificación de relaciones de causa o efecto (identificación de razones
explícitas relacionadas con los hechos o sucesos del texto).
La Lectura inferencial se constituye en la lectura implícita del texto y requiere
un alto grado de abstracción por parte del lector. Las inferencias se
construyen cuando se comprende por medio de relaciones y asociaciones el
significado local o global del texto. Las relaciones se establecen cuando se
logra explicar las ideas del texto más allá de lo leído o manifestado explícitamente
en el texto, sumando información, experiencias anteriores, a los saberes
previos para llegar a formular hipótesis y nuevas ideas.
El objetivo de la
lectura inferencial es la elaboración de conclusiones y se reconoce por inferir
detalles adicionales, inferir ideas principales no explícitas en el texto,
inferir secuencias de acciones relacionadas con la temática del texto, inferir
relaciones de causa y efecto (partiendo de formulación de conjeturas e
hipótesis acerca de ideas o razones), predecir acontecimientos sobre la lectura
y interpretar el lenguaje figurativo a partir de la significación literal del
texto.
La lectura crítica es la lectura de
carácter evaluativo donde intervienen los saberes previos del lector, su
criterio y el conocimiento de lo leído, tomando distancia del contenido del
texto para lograr emitir juicios valorativos desde una posición documentada y
sustentada. Los juicios deben centrarse en la exactitud, aceptabilidad y
probabilidad; pueden ser: de adecuación y validez (compara lo escrito con otras
fuentes de información), de apropiación (requiere de la evaluación relativa de
las partes) y de rechazo o aceptación (depende del código moral y del sistema
de valores del lector)
[1]
El término se aplica en psicología para definir la sensación
de ansiedad generada ante una tarea pendiente de concluir. https://www.psicoactiva.com/blog/la-procrastinacion/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario